Antes, el masaje solo estaba disponible en spas de lujo o gimnasios. Algunas personas lo consideraban un lujo para los ricos o un eufemismo para actividades prohibidas. Ahora, el masaje es accesible y se considera una herramienta importante para promover el bienestar físico y mental.

La terapia de masaje es un término general que abarca la presión, el roce y la manipulación de la piel, los músculos, los tendones y las articulaciones. El masaje puede variar desde un roce suave hasta una presión profunda. Generalmente se considera parte de la medicina integrativa.

La terapia de masaje se ofrece cada vez más junto con la terapia convencional para una amplia variedad de problemas y situaciones médicas. Si nunca has probado la terapia de masaje, sigue leyendo para descubrir sus numerosos beneficios.

Una idea errónea común sobre el masaje es que solo forma parte de un día de spa y que está destinado a mimarse uno mismo.Lee sobre ello masaje relajante precio de nuestros artículos

Si bien esto puede ser cierto para algunas personas, con mayor frecuencia se utiliza para reducir el estrés y aliviar el dolor.

Algunas afecciones específicas que el masaje puede ayudar a tratar incluyen:

• Ansiedad
• Depresión clínica
• Trastornos digestivos
• Fibromialgia



• Migraña
• Problemas del sueño
• Dolor nervioso
• Cuidados postoperatorios
• Cicatrices
• Distensiones y lesiones de tejidos blandos
• Lesiones deportivas
• Problemas de la articulación temporomandibular (ATM)

Beneficios físicos

Para muchas personas, la terapia de masaje es importante Como parte de planes de terapia médica específicos para ayudarles a retomar sus actividades cotidianas, el masaje puede ser beneficioso después de una cirugía de reemplazo articular o una lesión. Los beneficios físicos del masaje incluyen: Mejora la circulación sanguínea Reduce la tensión muscular Reduce la inflamación articular Mejora la calidad del sueño Recuperación más rápida entre sesiones de ejercicio Mayor flexibilidad Menos dolor y molestias Mejora la respuesta inmunitaria Beneficios psicológicos El masaje también ofrece numerosos beneficios para el bienestar psicológico. Además, quienes se centran en los beneficios físicos afirman sentirse menos estresados ​​tras recibir un masaje.

Otros beneficios mentales incluyen:

• Reducción del estrés
• Mayor relajación
• Mejora del estado de ánimo
• Reducción del estrés y la ansiedad
• Más energía
• Mayor sensación de bienestar

Después de un masaje

Es normal sentirse relajado, cansado o incluso dolorido después de un masaje. Esto se debe a que el masajista trabaja los músculos. Tras un masaje, puede parecer que has hecho ejercicio. Es posible experimentar frustración o náuseas después de un masaje. Algunas personas creen que el masaje debe causar dolor para ser beneficioso. Sin embargo, un masaje no tiene por qué ser desagradable para ser eficaz. Si su masajista ejerce demasiada presión, pida que la reduzca. A veces, puede tener una zona sensible en un músculo que se siente como un nudo. Es probable que sea incómodo mientras el masajista la trabaja. Pero si se vuelve insoportable, dígalo. La mayoría de los problemas graves se originan por una presión excesiva durante el masaje. Cómo encontrar un masajista Al igual que al elegir otros profesionales de la salud, es importante ser un cliente informado al elegir un masajista. Pida a su médico o a otra persona de confianza que le recomiende un servicio o terapeuta de confianza.

No dude en hacerle preguntas a un posible masajista, como:

• ¿Tiene licencia, certificación o registro?
• ¿Cuál es su formación y experiencia?
• ¿Cuántas sesiones de masaje terapéutico cree que necesitaré?
• ¿Cuál es el costo y está cubierto por el seguro médico?

Un especialista competente cuenta con una amplia gama de técnicas que puede integrar según sus necesidades, y las adaptará a sus respuestas.

El masaje terapéutico es seguro y confiable para personas de cualquier edad. No es solo una forma placentera de consentirse. Es una herramienta eficaz que te ayudará a tomar el control de tu bienestar y salud, tanto si tienes una afección médica específica como si buscas reducir el estrés.